¿Qué debe hacer?

¿Qué debe hacer?

Lo descrito en las diversas normativas permite deducir que la responsabilidad civil a título personal es un riesgo que afecta prácticamente a todo aquel que participa en una empresa. Los administradores y supervisores suelen ser los primeros afectados. Están obligados a desempeñar sus funciones de forma adecuada y consciente. Si no es así, corren el riesgo de que la empresa les declare responsables de los perjuicios que han causado al actuar de forma incorrecta. En caso de quiebra, el síndico suele recurrir a este planteamiento y declarar a los administradores y supervisores responsables frente a la sociedad. Además, en caso de la quiebra, existe a menudo el riesgo de incurrir en responsabilidades en virtud de la ley WBF con sus correspondientes escollos como, por ejemplo, la inversión de la carga de la prueba. Por último, los administradores y supervisores suelen ser objeto de demandas de terceros, incluyendo acreedores, empleados, proveedores y la administración fiscal.

Pero no sólo los administradores y los supervisores se enfrentan a estas responsabilidades. Si la empresa quiebra, todas las personas que hayan participado de forma intensiva en la administración de la empresa corren el riesgo de ser declaradas responsables de la totalidad del déficit patrimonial por parte del síndico.

 

En particular, los accionistas que, de forma evidente o entre bastidores, hayan participado en la administración de la empresa, se pueden enfrentar a una demanda por responsabilidad civil, aunque también pueden verse afectados los contables u otros asesores. Dicha responsabilidad civil puede extenderse a cualquier persona que haya adoptado decisiones administrativas en la empresa como si fuera un administrador.

No solo se requiere asesoramiento y asistencia experta en la fase en la que el administrador ha sido declarado responsable, sino también antes. Al fin y al cabo, el patrimonio personal del administrador está en juego en caso de enfrentarse a una demanda de responsabilidad civil a título personal. Desde el punto de vista contrario, también si usted, como accionista, inversor, empleado o administrador posterior, se siente perjudicado por la administración o la conducta de un administrador o supervisor. Incluso si usted es un acreedor de una empresa que ha efectuado y recibido pedidos pero no cumple con sus obligaciones de pago, puede plantearse la responsabilidad civil a título personal de un administrador si los demás acreedores de la empresa sí han recibido su dinero.

 

Los abogados de Borsboom & Hamm N.V. están altamente cualificados en todos estos ámbitos jurídicos. Su enfoque se centra en gran medida en todos los aspectos del derecho societario. Si desea demandar a un administrador por los perjuicios causados o si usted es un administrador de una empresa objeto de una demanda por responsabilidad, es indispensable contar con el asesoramiento de expertos.

Si tiene la impresión de que su actual asesor no domina esta materia lo suficiente, puede solicitar una segunda opinión sobre su caso. En cualquier caso, necesita un especialista con la experiencia necesaria en situaciones de responsabilidad civil a título personal. Alguien que pueda hacer frente a la presión a la que se ven sometidos los administradores cuando su actuación se ve en entredicho. Alguien que conozca el repertorio de recursos de los síndicos tan bien cono ellos. Alguien que, cuando desee investigar la actuación de un administrador, sepa qué opciones existen para defender sus derechos, judicialmente y extrajudicialmente hasta llegar al Tribunal Supremo.

Borsboom & Hamm N.V. puede ayudarle. Puede ponerse en contacto con el Sr. C.F.W.A. Hamm o Sr. J.P.M. Borsboom. Dirigen a grupos de abogados cualificados y especializados en el asesoramiento y en los procedimientos de responsabilidad civil, dispuestos a actuar como síndicos en la defensa o en demandas contra los administradores, supervisores y otros responsables que hayan sido declarados responsables. Todas las notificaciones se tratarán con la máxima confidencialidad.